Un Sancocho de Sentimientos

Las emociones pueden ser una sopa
Blog

Un Sancocho de Sentimientos

Si eres venezolano sin lugar a dudas sabes lo que es un sancocho, esa rica (para algunos) y popular sopa llena de muchos y variados ingredientes. Quizás lo que en Colombia pudiera ser un Ajiaco o en México un Pozole.

Pues, aunque no lo creas, tu mundo emocional cotidiano es, justamente, como un sancocho de sentimientos. En él se mezclan a lo largo de las horas un montón de ingredientes (sentimientos) que al final del día le confieren la sopa un sabor emocional particular. Quizás un día el ingrediente principal sea la tristeza, otro día el amor y otro el miedo. Pero nunca la sopa se compone de un solo ingrediente. No pasa un día en el cual no sientas cientos de sentimientos diferentes, y cada día estos sentimientos varían, de manera que siempre surgen nuevas e inéditas recetas. ¡La sopa nunca sabe igual!

Quizás la sopa de ayer contenía:

Mucho aburrimiento (500 gramos de chayota)

Una pizca de rabia (pimienta)

Algo de paz (200 gramos de papas),

Un poquito de ansiedad (1 ají picante bien picadito),

Un poco de alegría (200 gramos de maíz) y

Bastante preocupación (300 gramos de cebolla).

¿Te gusta esta sopa? Quizás no… ¡pero eso fue ayer! Hoy los ingredientes van a ser otros, y la cantidad de cada ingrediente también. Como reza la sexta premisa de la Eficiencia Emocional, “cada momento es un momento”. Nunca la receta es igual, siempre hay variaciones emocionales, no importa cuan iguales parezcan los días, no importa cuan gris se vea todo, especialmente en estos momentos de cuarentena donde el tiempo parece detenerse.

En el momento en que comiences a prestarle atención a tu mundo interior y a todos los sentimientos que sientes a lo largo del día, te darás cuenta de la infinita cantidad de ingredientes que conforman tu sancocho emocional. Y si te permites experimentar con todos los ingredientes, si le das la bienvenida a todos los sentimientos que surgen a lo largo del día, las sopas serán cada vez más interesantes, variadas y, sobre todo, sanas. Porque una emocionalidad sana incluye todos los sentimientos.

Y, finalmente, si en estos tiempos complejos además comienzas a prestarle más atención a algunos de los ingredientes que te gustan más, como la amistad, el amor, la alegría, el entusiasmo y la tranquilidad, en vez de enfocarte en los ingredientes desabridos y desagradables, ¡quizás ese sancocho te sepa mejor cada día!

Artículos Recientes